El mortífero terremoto de 9,0 en la escala de magnitud de momento ocurrido este año en Japón, el terremoto de 8,8 en Chile el año pasado y el terremoto 9,0 en Sumatra-Andamán en 2004 hicieron pensar a algunos círculos científicos y medios de comunicación que estos fenómenos podían estar relacionados.
Pero los investigadores de la Universidad de California revisaron los registros sísmicos mundiales, que datan de 1900, y concluyeron que no hubo un aumento estadísticamente significativo en el número de grandes terremotos (de magnitud 7,0 y superior).
No hay comentarios:
Publicar un comentario